Sección Bibliográfica
ANTONIO DE LA NUEZ CABALLERO
Antonio de la Nuez Caballero
Antonio de la Nuez Caballero (Las Palmas de Gran Canaria, 1915) es abogado, periodista, licenciado en Letras y profesor de Castellano y Literatura, Latín y Griego. Cursó bachillerato en el Instituto Pérez Galdós de su ciudad natal, donde tuvo como profesor a Agustín Espinosa, representante del surrealismo en Canarias. Allí comenzó a hacer una revista llamada Hoja Azul (1932-34) en compañía de Juan Márquez García y Cirilo Benítez; y publicó su primer artículo, sobre Baruch Spinoza.
Estudió Derecho en la Universidad de La Laguna, se graduó en 1939. Durante la Guerra hizo el curso de teniente en la Academia del Hospital Tavera, Toledo, fue destinado a la Kabila de Beni Urriaguel y después, en la Academia General de Zaragoza siguió la carrera militar, y al terminarla fue enviado a La Palma, donde inició la carrera de Filosofía y Letras. "Pero murió mi padre y tuve que hacerme cargo de la ferretería familiar, porque todavía mi hermano Chano, ni mi hermano Víctor habían terminado la carrera. Después volví a La Palma; pedí la Escuela de Estado Mayor, que se me aceptó. Junto a la Escuela estaba el Servicio Histórico Militar, al que fui destinado".
Siguió después las carreras de Filosofía y Periodismo en Madrid, y en 1952 don Otto Kraus lo nombró director del diario La Provincia, de Las Palmas. En ese cargo estuvo durante dos años, pero su condición de militar le trajo problemas con el capitán general, a quien no gustaba que ejerciera como director de un periódico ni tampoco como secretario del Museo Canario. Pidió la baja en el Ejército y se marcho a Venezuela en 1955, donde habría de permanecer por casi veinte años.
En Venezuela ejerció como profesor de bachillerato, creó en Maracaibo la Revista del Zulia, gerenció las relaciones culturales de la Embajada española -cuando el embajador canario Matías Vega-, fue corrector de estilo en la editorial estatal de Letras de la Universidad Central, coordinó las ediciones de la Corporación Venezolana de Guayana y, en las postrimerías de su estadía, abrió la cátedra de Lengua y Comunicación en la recién creada Universidad Metropolitana.
En 1973 desanduvo el camino de regreso a Canarias, donde solicitó la equivalencia o convalidación del título de Filosofía y Letras, sección Románicas, para lo cual realizó los exámenes correspondientes en La Laguna. Comenzó inmediatamente como profesor de Lengua y Literatura de COU en el Instituto Isabel de España, en Las Palmas, y desde 1974 ejerció como profesor tutor de la UNED.
Colaborador en numerosos medios impresos de Venezuela y Canarias, De la Nuez ha publicado, además, La isla, una descripción intimista sobre Gran Canaria; Breviario de literatura canaria y el ensayo El antro del cachalote.
Fue co-autor de Pictografías para un cuerpo en la Fablas, donde escribió "De Góngora a la Haken Kreuz". Además ha desarrollado la vena poética en su particular homenaje al escritor venezolano Rómulo Gallegos (Tríptico en la pared del viento) y en varios números de la separata del diario El Día, Archipiélago Literario.
Como antecedente de su gran obra Signos de los Templarios en torno al Planeta en relación con Canarias tiene un folleto del Museo Canario (1988-91) donde expone su lectura -él es el primero en reconocerlo: muy influenciado por el padre Otazu- sobre "Los símbolos de los canteros, su encuadre dentro de la simbología general".
Editorial:
Cabildo de Tenerife,
Museo de Historia de Tenerife,
Cabildo de Gran Canaria.Año de publicación:
2001Medidas:
27 x 21 cm.Nº páginas:
204Papel interior:
Simbol-matt 150 gramosCubierta:
Cartulina cromocard 300 gramos con solapaIlustraciones:
97
(12 de ellas a color)Otras características técnicas:
Plastificado mate,
encuadernación rústica,
cosido hilo vegetal
Cuidado de la edición:
Carmen Rosa de la Nuez
Sebastián de la NuezDiseño gráfico y fotomecánica:
Lionel Arida
Precio:
33 €
(+ gastos de envío)Descuento socios Templespaña (25%):
24.75 €
(+ gastos de envío)
(Pinchar imágenes)
SIGNOS DE LOS TEMPLARIOS EN TORNO AL PLANETA EN RELACIÓN CON CANARIAS
Antonio de la Nuez Caballero
Curioso libro y muy cuidada la edición de este enciclopédico y atractivo volumen, tras cuyo título, en palabras de la célebre escritora y articulista del diario El País, Rosa Montero, "se oculta un tema de gran interés: el rastro que los caballeros templarios dejaron sobre la Tierra, tras ser prohibidos y perseguidos en el siglo XIV. Sostiene Antonio de la Nuez que algunos templarios se refugiaron en las islas Canarias, y se ha dedicado a investigar este asunto durante nada menos que sesenta años. Ahora, cumplidos ya los 86, ha publicado su libro. Sin duda debe de ser un personaje singular este don Antonio vital y octogenario, capaz de mantener durante toda su vida semejante obsesión investigadora".
Dicen que el apellido De la Nuez es de origen aragonés, aunque por otra parte hay un De la Nocce localizado en Génova. En todo caso, el autor de esta obra encontró cierta vez una historia acerca de los caballeros De la Nuez, fundadores de Nuez del Ebro, cerca de Zaragoza. Habían ido a la conquista del reino musulmán de Mallorca junto al rey Jaime El Conquistador, el más importante de los reyes que protegió a los templarios. Como se sabe, en 1314 el Papa y el rey de Francia disuelven la Orden del Temple a sangre y fuego.
Desde luego, son insondables los impulsos que mueven a un escritor a reunir vestigios curiosos sobre la simbología universal durante sesenta años, pero algo de solidaridad ancestral debe haber en los cromosomas que arrastra un apellido.
Por lo demás, el interés del autor por los caballeros templarios recibió bautismo y confirmación al entrar en contacto, en los tempranos años treinta, con el padre Juan Otazu, expulsado de los jesuitas de España en la época de la República. "Me lo presentaron, y supe que investigaba las relaciones que habían tenido durante la Edad Media los templarios con toda la civilización universal. Según él, el diccionario chino está lleno de relaciones con palabras occidentales. Eso que expongo en mi libro no lo descubrí yo, fue aprendido del padre Otazu".
De perseguidos que dejaron huellas y perseguidores que han tratado de borrarlas a lo largo de los tiempos: de eso trata esta obra; oro y diamante, yin y yang, dragones y ouroboros: una investigación escrita por alguien que ha vivido persecuciones, propias y ajenas, en pleno siglo XX.
Contenidos:
- Prólogo
- Capítulo I: La serpiente se muerde la cola
- Capítulo II: Los símbolos de los canteros
- Capítulo III: La cruz y la estrella unidas en Telde
- Capítulo IV: Signos canteriles, certificados de obra
- Capítulo V: Arquitectura como expresión templaria
- Capítulo VI: Misterios, universales, cabalísticos
- Capítulo VII: Universalización de los signos canarios
- Capítulo VIII: Mentira y realidad histórica
- Capítulo IX: Clásicos con clave
- Capítulo X: China, tan cerca y tan lejos
- Capítulo XI: Escabechina en París
- Capítulo XII: Literatura verdadera e historia falsa
- Capítulo XIII: De la filología a la sígnica
- Capítulo XIV: Teoría de las confusiones
- Capítulo XV: Los agujeros negros de la Historia
- Capítulo XVI: Los templarios y sus secretos
- Capítulo XVII: Falsificaciones
- Capítulo XVIII: La literatura para ocultar
- Capítulo XIX: La heráldica
- Epílogos varios
- Bibliografía
Formulario de pedido
* Rellenar todos los datos